La crisis climática ha empujado a la industria automovilística a la fabricación de coches eléctricos. Muchas firmas del sector ven en estos vehículos una garantía de futuro, la plataforma sobre la cual poder operar en un mundo que busca, paulatinamente, reducir las emisiones de CO2. Sin embargo, el auge de las ventas de estos coches se ha ralentizado inesperadamente, siendo una de las causas, aparentemente, el elevado precio de los mismos. Parece que la primera ola de consumidores de coches eléctricos ya ha pasado, y los siguientes potenciales usuarios no están dispuestos a realizar un gran desembolso. Por ello, muchas firmas están trabajando en el lanzamiento de nuevos coches eléctricos a un precio asequible. Un ejemplo es Volkswagen, que ha confirmado que se encuentra trabajando en un nuevo modelo eléctrico de 20.000 euros para 2027.
Redactor de economía, mercados, energía y política internacional. Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.