Motor

Conoce las diferencias entre los coches híbridos: MHEV, HEV y PHEV

  • Dependiendo de la hibridación puede cambiar: consumo, etiqueta de la DGT, precio, ¡e incluso la capacidad en el maletero!
  • Todos los coches híbridos cuentan con etiqueta ECO o CERO de la DGT

Si no tienes muy claro qué tipo de hibridación se ajusta más a tu persona a la hora de comprar tu nuevo coche, nosotros te explicamos las diferencias y utilizaremos como ejemplo un modelo que cuenta con las tres hibridaciones, para verlo más fácilmente.

Puede que estés en la tesitura de cambiar tu antiguo coche y que te llame la atención la electrificación, pero que no te atrevas a dar el paso a tener un vehículo 100% eléctrico y prefieras tener un coche híbrido. Una vez tomada esta decisión, ya solo queda elegir el tipo de hibridación que más se ajuste, MHEV, HEV o PHEV.

Diferentes tipos de hibridación

Las siglas de las que acabamos de hablar es probable que no te aclaren la duda, por lo que vamos a explicar qué significa cada una.

MHEV o Mild Hybrid Electric Vehicle es lo que se suele llamar a los coches microhíbridos o con hibridación suave.

Este es el nivel más bajo de electrificación y suele contar con un pequeño motor híbrido que no suele superar los 20 CV que no es capaz de mover por sí solo el coche en modo 100% eléctrico. Este motor está destinado a asistir el motor de combustión en salidas desde parado y está alimentado a partir de una pequeña batería de 12 o 48 voltios que se recarga a partir del frenado regenerativo. Esta electrificación, te aporta la etiqueta ECO de la DGT, con la que puedes acceder a grandes ciudades como Madrid, e incluso adentrarte por el centro histórico de estas.

El siguiente paso son los híbridos convencionales, o también llamados HEV. Estos cuentan con un propulsor eléctrico con mayor potencia y se alimentan de una batería algo mayor que, al igual que en el anterior caso, se recarga a partir del frenado regenerativo o con el propio motor de combustión (lo que aumentará el consumo de combustible).

Estos sí que tienen la capacidad de moverse por sí solos en modo 100% eléctrico, aunque la autonomía es limitada y suele ser de unos 5 kilómetros a lo sumo. También cuentan con la etiqueta ECO de la DGT.

Pasando al último caso, el hibrido enchufable o PHEV (Plug-in Hybrid Electric Vehicle), son los que mayor autonomía eléctrica anuncian. El motor eléctrico suele tener entre 60 y 120 CV y la batería una capacidad de entre 8 y 30 kWh. La autonomía eléctrica suele ser desde los 40 hasta algo más de 100 kilómetros, todo dependiendo del vehículo. Lucen la etiqueta CERO de la DGT.

En este caso, además de cargarse la batería a partir de la regeneración por frenada, se hace enchufando el vehículo a un cargador. Lo más recomendable es poner un cargador en tu domicilio ya que si cargamos el vehículo en nuestra casa, las recargas serán muy baratas y gastaremos muy poco combustible (o nada) en desplazamientos diarios.

Ventajas y desventajas de los diferentes híbridos

Para los híbridos y microhíbridos hay cuatro grandes ventajas a la hora de comprar estos vehículos. La primera es la reducción del consumo respecto a un coche gasolina o diésel convencional. No será enorme, pero algo se notará. La segunda es la mencionada etiqueta ECO que, además de lo comentado anteriormente, te permite aparcar en la calle a un precio más bajo que los que cuentan con la etiqueta C y B. La tercera es que vas a seguir usando el coche de la misma manera de como lo hacías con un coche de combustión puro, ya que no necesitas de ningún enchufe para cargar el vehículo. Podemos incluir una última, que es que el consumo siempre va a rondar los mismos niveles, ya que, en los PHEV, a la hora de recorrer grandes distancias, serán muy dispares.

Respecto a las desventajas, para empezar, es el precio del coche, que aumentará respecto a un modelo gasolina o diésel. Otra puede ser la capacidad del maletero, que se puede ver mermada por dónde se coloque el motor eléctrico y la batería. Finalmente, aunque antes hablábamos a favor del consumo, en el día a día, siempre va a ser mejor el consumo de un híbrido enchufable por su mayor autonomía eléctrica.

Turno para los híbridos enchufables

Vayamos con los híbridos enchufables. Respecto a las ventajas, encontramos el consumo, el gasto económico diario y la etiqueta CERO. Para el día a día, por lo general el gasto de estos vehículos es ridículo, ya que puedes circular en modo 100% eléctrico y no llegar a consumir nada de combustible o muy poco.

Si cuentas con un cargador en casa, el gasto va a ser realmente bajo, debido a que los kilómetros cargados con un cargador en casa siempre van a ser mucho más baratos que los de la gasolina. Cuentas con la etiqueta CERO con la que puedes aparcar gratuita e ilimitadamente en la calle, además de poder entrar al centro de las ciudades y a sus centros históricos. Una ventaja respecto a los 100% eléctricos es que el gasto diario será muy parecido, pero a la hora de poder realizar un viaje, no tendrás que parar a cargar el vehículo, ya que también se puede mover con gasolina.

Hablemos de cinco desventajas. Para empezar, tienes que contar con un garaje, ya que no te saldrá rentable elegir un híbrido enchufable si vas a cargarlo en cargadores que puedes encontrar por la calle, ya que estos son más caros y seguramente no tengas uno debajo de tu casa. La segunda es que tendrás que contratar una tarifa e instalar un cargador para cargar tu vehículo.

El tercer punto es que, cada día, tendrás que enchufar tu vehículo, una acción a la que te acabas acostumbrando, pero que no hacías hasta ahora. La cuarta desventaja es que, cuando la batería se descarga, el aumento del consumo del vehículo crece considerablemente, superando a las motorizaciones solo de gasolina, debido al peso del motor eléctrico y de la batería, por lo que no recomendamos esta opción si se van a realizar muchos kilómetros diariamente. Finalmente, la quinta, como en el anterior caso, es la pérdida de espacio en el maletero, donde el motor eléctrico y las baterías (más grandes que en el anterior caso) pueden quitarte una gran capacidad de almacenaje.

Un ejemplo práctico

Para este ejemplo, vamos a utilizar el SUV Mitsubishi ASX, que cuenta con motorizaciones de gasolina, MHEV, HEV y PHEV.

Mitsubishi ASX 100T Spirit

  • Motorización: 90 CV (gasolina)
  • Consumo: 5,8/l cada 100 km
  • Gasto mensual (500 km): 47,01 euros
  • Etiqueta: C
  • Maletero: 422 litros
  • Precio coche: 22.290 euros

(Precio de la gasolina a día de hoy: 1,621 euros/litro)

Mitsubishi ASX 130T MHEV Motion

  • Motorización: 140 CV (MHEV / gasolina)
  • Consumo: 5,7/l cada 100 km
  • Gasto mensual (500 km): 46,21 euros
  • Etiqueta: ECO
  • Maletero: 422 litros
  • Precio coche: 24.790 euros

Mitsubishi ASX 160 HEV Kaiteki

  • Motorización: 144 CV (HEV / gasolina)
  • Batería: 1,2 kWh (0,85 kWh capacidad útil)
  • Consumo: 4,7/l cada 100 km
  • Gasto mensual (500 km): 38,09 euros
  • Etiqueta: ECO
  • Maletero: 305 litros
  • Precio coche: 30.590 euros

Mitsubishi ASX 160 PHEV Kaiteki

  • Motorización: 144 CV (PHEV / gasolina)
  • Batería:10,5 kWh
  • Consumo: 1,3/l cada 100 km
  • Km en 100% eléctrico: 49 km
  • Gasto mensual (500 km): 10,15 (gasolina) + 5,99 (electricidad) = 16,14 euros*
  • Etiqueta: 0
  • Maletero: 261 litros
  • Precio coche: 32.190 euros

*Para calcular el gasto de la versión híbrida enchufable, hemos utilizado el consumo WLTP cada 100 kilómetros y sumado lo que costaría cada carga cada 100 km. Finalmente lo hemos ajustado de 100 a 500 kilómetros.

Aunque la potencia de cada motorización es diferente (y acabados también), gracias a este modelo hemos podido ver la diferencia entre todos las tecnologías de hibridación. Ya solo queda que, según tus intereses, elijas cuál es el tipo de electrificación que más se ajusta a tus necesidades a la hora de comprar un nuevo coche.

WhatsAppTwitterTwitterLinkedinBeloudBeloud