Zaragoza
La detección de enfermedades en el sector ganadero es clave en una granja para garantizar el bienestar animal y evitar la propagación propapagción de patologías a toda la cabaña, además de poner en marcha lo antes posible las medidas que eviten el contagio y favorecer la sanación del animal enfermo. La tecnología está siendo de gran ayuda para dar respuesta al sector de la ganadería. Es el caso del sistema desarrollado entre Augan y UnaBiz, que han creado una solución basada en Internet de las cosas (IoT) que monitoriza el agua en la explotación ganadera para detectar enfermedades de tipo pulmonar.
Esta solución se basa en tecnologías innovadoras para mejorar la detección temprana de enfermedades en el ganado, ya que facilitan el análisis de patrones de comportamiento y de variables ambientales para anticipar la presencia de posibles problemas de salud antes de que se manifiesten de manera evidente y, si ya han hecho su aparición, realizar un control del ganado porcino.
El sistema consiste en la instalación y monitorización de sensores IoT conectados a los contadores de agua, situados en las instalaciones ganaderas porcinas. Una vez colocados, a través de las redes IoT se envía información del consumo diario del agua por parte de los animales. Esta información se monitoriza en la app móvil.
Esto permite a los ganaderos llevar un control preciso del agua que se consume en tiempo real y obtener datos para mejorar la eficiencia operativa, así como la salud y el bienestar animal. La clave está en que estos sensores IoT están concebidos para detectar patrones anómalos o irregulares en el consumo de agua, lo que puede indicar problemas de salud. De este modo, la capacidad de identificar estos cambios tempranos facilita la prevención de enfermedades en el ganado y su correspondiente tratamiento.
El ganadero puede reducir las bajas en su cabaña entre el 1% y el 3%
El sistema de detección es muy sencillo. Salta la alerta cuando el consumo se dispara hacia arriba o hacia abajo. "Si es al alza, suele ser un problema de la instalación", afirma Eloy Garrigues, fundador de Augan, especializada en la instalación y monitorización de sensores en el sector ganadero. De este modo, lo más probable es que haya una fuga. Sin embargo, en el caso de que el consumo vaya a la baja, es un indicativo de una posible enfermedad.
Las pruebas realizadas detectaron una enfermedad pulmonar en los cerdos, precisamente, porque se había producido una reducción en el consumo de agua y un aumento de la tos de los animales, añade Garrigues. De hecho, este sistema, que también puede funcionar con otras cabañas ganaderas, detecta las enfermedades englobadas en la patología pulmonar, la disentería o la gripe, entre otras, que tienen en común que el animal se encuentra más débil y bebe menos agua, explica a elEconomista
Con este sistema, el ganadero logra reducir el porcentaje de bajas entre el 1% y el 3%, en función de si son lechones o cerdo adulto, por la anticipación a enfermedades. Englobando a ganadero e integradora, se podría optimizar económicamente en torno al 4% la explotación. Además, en la mayoría de los casos, la solución se amortiza el primer año.
Más bienestar animal y menos costes
Esta detección temprana tiene otras ventajas para el ganadero, puesto que puede alertar al veterinario de posibles problemas de salud en el ganado. Además, se produce una optimización de los recursos al conocer los datos en tiempo real sobre el consumo del agua para ajustar y realizar una mejor gestión de los recursos hídricos y, en consecuencia, mejorar la eficiencia operativa.
Con una media normal de una granja de porcino, de bebederos que fugan y un par de fugas grandes al año de rotura de tuberías, puede haber un ahorro de agua de alrededor del 5%, de acuerdo con los datos de las pruebas realizadas. No obstante, este porcentaje puede variar en función de la instalación.
La optimización económica de la granja se sitúa en torno al 4%
La solución también contribuye a la mejora del bienestar animal al garantizarse el suministro adecuado de agua y prevenir enfermedades. En este caso, cabe destacar que el sistema desarrollado es capaz de no superar el valor marcado por la normativa (máximo de 20ppm de nh3). Además, gracias a las medidas de temperatura y humedad, igualmente se gestiona mejor el confort térmico a la par que el consumo de agua, evitando taponamientos en bebederos y filtros de agua.
De este modo, se reducen costes como consecuencia de una eficiencia operativa mejorada y por la prevención de las enfermedades, lo que reduce costes a largo plazo. El sistema también aporta mayor seguridad a la granja al anticiparse posibles problemas de ventilación, fallos de bombas o motores.
Más medioambiente
El sistema también emplea la red 0G de UnaBiz, proveedor e integrador global de servicios IoT masivos a través de diferentes tecnologías de comunicación en red, para ayudar al ganadero a llevar un registro de las condiciones ambientales dentro de las granjas.
Con tan solo ubicar sensores IoT al nivel de la cabeza del animal, es posible hacer un control de gases CO2 y amoniaco en el ambiente, además de medir las condiciones de temperatura y humedad. De este modo, se contribuye a evitar el estrés animal producido por la concentración de ambos gases y un ambiente insano en la explotación.
Con este registro, las granjas están en disposición de cumplir con el Real Decreto 159/2023 en el que se establecen las disposiciones de aplicación en España de la normativa de la Unión Europea sobre controles oficiales en materia de bienestar animal como el mayor espacio por cabeza de ganado, los registros de gases en las explotaciones o las medidas mínimas de los comederos.
