Actualidad

¿Qué es el Hard Rock? El proyecto que ha provocado el adelanto electoral en Cataluña

Terrenos en los que se ubicará el Hard Rock, de ver la luz. EFE
Barcelonaicon-related

El complejo de casinos y hoteles que Hard Rock proyecta en Tarragona ha terminado por tumbar los Presupuestos catalanes de 2024 y provocar el adelanto electoral en la comunidad al próximo 12 de mayo. Aunque la Generalitat insistió en que no se iba a destinar un solo euro público a la iniciativa y todo dependía de un acuerdo entre privados, las explicaciones no convencieron a En Comú Podem, que exigía cancelar la instalación para dar su visto bueno a las cuentas.

Los 'comuns' exigían que la Generalitat paralizase el Plan Director Urbanístico (PDU) que el complejo proyectaba entre los municipios de Vila-Seca y Salou, en la provincia de Tarragona. El marco normativo inicial, de 2016, fue suspendido por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya en 2020.

Sin embargo, el proyecto -o iniciativas similares- lleva casi 15 años en la agenda catalana sin que, por el momento, se hayan desbloqueado. El germen de todo fue el proyecto Eurovegas que el magnate Sheldon Adelson pretendía hacer en España. Y puso a competir a Cataluña y Madrid para ver quién se quedaba el complejo.

El dirigente pidió excepciones en, por ejemplo, la ley antitabaco española, para que se pudiese fumar en sus casinos, así como múltiples beneficios fiscales. Y cuando parecía que se iba a decidir por Madrid finalmente dio la espantada para informar de que los planes de expansión de Las Vegas Sands pasaban por Asia.

Enrique Bañuelos estuvo implicado en el proyecto

Para compensarlo, la Generalitat presentó en 2012 el proyecto de BCN World de la mano del polémico Enrique Bañuelos, protagonista de la quiebra de la inmobiliaria valenciana Astroc. El empresario desapareció, pero entró en escena Hard Rock International (propiedad de la tribu de los indígenas semínolas de Florida).

Por el camino, Cataluña aprobó reducir la carga fiscal de los casinos al 10% frente al 55% anterior. Eso sí, el recorte entrará en vigor cuando abra la instalación, aunque los comuns también presionan para que esta rebaja no se lleve a cabo.

En concreto, la formación pretende que se mantengan los porcentajes actuales: el 20% de los beneficios hasta 1,2 millones de euros de ingresos, el 25% de los beneficios hasta los 2,2 millones de euros de ingresos, el 45% hasta los 4,5 millones y el 55% si se supera la última cantidad.

La empresa obtuvo los permisos definitivos en 2018, aunque el plan urbanístico ya había recortado en un 25% la superficie urbanizable y el espacio disponible para casinos era siete veces inferior al previsto originalmente. La situación quedó enmarañada por la tramitación y la pandemia, que tampoco ayudó a agilizar los procedimientos.

Los terrenos son propiedad de La Caixa

Además, la Generalitat debía afrontar la compra de los terrenos a Criteria –el holding inversor de La Caixa y dueño del suelo- para revenderlo a Hard Rock, algo que todavía no ha pasado. La inversión total se estima en 700 millones de euros, aunque podría alcanzar los 2.000 millones de hacerse al completo.

La aprobación del nuevo Plan Director fue uno de los requisitos del PSC para aprobar los Presupuestos de 2023 a pesar de que desde ERC siempre hubo corrientes de rechazo al plan. No obstante, en las últimas semanas dijo que no se podía parar por el estado actual de los permisos al tratarse de un acuerdo entre particulares y que tratar de hacerlo implicaría indemnizaciones millonarias.

Y lo cierto es que el Departament d'Empresa encontró una nueva vía para trastabillar el proyecto. El Govern emitió en septiembre un informe en el que supeditaba la aprobación del complejo turístico a que la compañía química Ercros implementase cambios en materia de seguridad en la instalación adyacente.

Algunos ya se han comenzado aplicar, pero otros deben ser aprobados por la propia Generalitat, que tendría la posibilidad de no otorgar estos permisos medioambientales para detener el proyecto Hard Rock.

Los detalles del Hard Rock

Entre tantas dificultades administrativas, nadie sabe exactamente cómo será el proyecto Hard Rock, pues todavía no está aprobado el nuevo Plan Director Urbanístico. En los documentos sometidos a información pública se dejan entrever algunas pistas: la superficie se ha reducido de 101,7 hectáreas a 61 hectáreas respecto al PDU de 2016 y la altura máxima se mantiene en 75 metros, aunque se reservó una excepción para un edificio que alcance los 90 metros y que se especula con que pueda ser un hotel con la icónica forma de guitarra de Hard Rock.

Mientras, la norma de 2016 daba espacio para un casino, que se hizo con la licencia adjudicada por la Generalitat. De los 745.000 metros cuadrados con techo edificable, solo 30.000 podrían ir destinados al área de juego, lo que equivaldría a un gran casino. El resto se repartirían entre usos hoteleros, comerciales y de ocio.

WhatsAppTwitterTwitterLinkedinBeloudBeloud