La gran banca española pulverizó en 2023 su récord de ganancias con 26.088 millones, lo que supone un aumento del 27% frente a 2022. Pese a ello, las entidades adelantaron que este ejercicio volverán a batir su tope de beneficios. El mercado ya compra esa predicción, lo que evidencia un horizonte de tipos altos más duradero del que se esperaba, lo que seguirá impulsando la rentabilidad de los bancos. Pero además, el sector cuenta con sus propios argumentos para avalar el mayor crecimiento previsto de las ganancias. A ello contribuirá que aún no se han repreciado parte de las hipotecas, la mayor actividad crediticia prevista por la caída que ya muestra el euríbor y la estrategia de moderación de subidas de costes en la que están inmersas todas las entidades.
