La fiebre por los hospitales privados contagia a Valencia: Vithas, Imed, Ascires y Quirón suman proyectos

Los grandes grupos sanitarios privados y los fondos de inversión han puesto en los últimos años sus ojos en la ciudad de Valencia como una zona de expansión. Un boom en el que tiene mucho que ver el auge de la contratación de los seguros privados de salud pero al que también se suman otros factores como la concentración en el sector o las alianzas entre operadores sanitarios y firmas de inversión inmobiliaria. En el mapa de Valencia ya hay cuatro nuevos hospitales privados señalizados.

El más avanzado, hasta el punto de que se espera que vea la luz en apenas unos días, es el nuevo hospital de Imed, un grupo que tras años de experiencia en Benidorm se puede decir que arrancó la actual oleada de nuevos hospitales con la apertura de un gran centro de 37.000 metros cuadrados y 185 habitaciones, en el vecino municipio de Burjassot. Tras la buena marcha de ese centro, el operador sanitario encontró una oportunidad para crear un centro complementario en pleno centro urbano, en el edificio que albergó la antigua sede de Iberdrola en la calle Isabel La Católica y que llevaba veinte años vacío.

Según explican desde la empresa, el nuevo centro bautizado como Imed Colón permite "acercar su modelo a aquellos distritos de la ciudad que tienen más dificultad para acceder a Burjassot". Pese a que su espacio es más reducido, con 12.000 metros cuadrados, el centro ofrecerá los servicios de un hospital general, con las principales especialidades médicas y quirúrgicas, diagnóstico por imagen de última generación, urgencias 24h, bloque quirúrgico, análisis clínicos y fisioterapia/rehabilitación. La intención es que su actual centro en Burjassot, Imed Valencia, funcione como hospital de referencia y respalde a esta nueva apertura, que está prevista para marzo.

Precisamente una de las claves para llevar a cabo este proyecto ha sido la alianza de Imed con el fondo inmobiliario estadounidense Medical Properties Trust (MPT), dueño también de las torres que albergan Imed Valencia. El grupo español llegó a un acuerdo con el fondo dueño de cientos de clínicas y hospitales en todo el mundo para desarrollar tanto este centro en Valencia como sus dos nuevos proyectos en Madrid y Barcelona, con una inversión total de 121 millones de euros. Según las cuentas anuales de MPT, el presupuesto para el primer centro, el de Valencia, se sitúa en 50,9 millones de dólares (47 millones de euros)

Imed no es el único operador que busca reforzar su posición en Valencia. Vithas, el grupo que se convirtió en el primer operador privado en la ciudad tras comprar la firma local Nisa en 2017, ya tiene muy avanzadas la obras del que será su tercer hospital. El grupo propiedad de la familia Gallardo, vinculada a la farmacéutica Almirall, prevé abrir en 2025 un hospital con 95 habitaciones y un total de 27.000 metros cuadrados.

El grupo prevé una inversión total de 71 millones de euros para un edificio ubicado en el barrio de Malilla, una de las zonas de crecimiento de la ciudad muy cerca del Hospital La Fe, el mayor de Valencia. Entre sus equipamientos, el nuevo centro incluirá siete puestos UCI-reanimación, una decena de quirófanos, 40 espacios destinados a consultas externas, cuatro áreas de exploraciones avanzadas y servicio de urgencias 24 horas.

Según la empresa, el hospital bautizado como Vithas Valencia Turia, dará empleo directo a más de 600 profesionales sanitarios y no sanitarios. La nueva infraestructura, sumada a la capacidad de sus otros dos centros actuales, el 9 de Octubre y el Consuelo, permitirán al grupo superar las 14.000 intervenciones quirúrgicas anuales, unas 80.000 urgencias, 9.000 ingresos y más de 250.000 consultas ambulatorias.

Precisamente en la puja por Nisa, Vithas se impuso al líder en el sector nacional, Quirónsalud. El mayor operador de hospitales privados en España. El grupo que tiene también uno de los centros más veteranos en Valencia tiene en cartera desde hace más de una década la creación de un nuevo hospital, para lo que posee suelo también en el barrio de Malilla. El Ayuntamiento de Valencia dio el visto bueno el año pasado a transformar el uso dotacional previsto inicialmente a los 20.184 metros cuadrados para darle uso sanitario, aunque desde la compañía no desvelan ni los plazos ni la inversión para el proyecto.

Centros especializados

En el mismo eje de Bulevar Sur o Ronda Sur se ubica otro centro que ya está en construcción, el del grupo valenciano Ascires, nacido a partir de Eresa y especializado en diagnóstico por imagen. El holding de la familia Saus que cuenta con una red de 9 clínicas en Comunidad Valenciana y Cataluña inició el año pasado las obras del que será su buque insignia, el Hospital Biomédico Ascires. Un centro de 30.000 metros cuadrados que se enfocará fundamentalmente a Neurología y Cardiología.

El edificio con siete plantas, cuenta con un presupuesto de construcción de 25,4 millones de euros, al que se suman otros 30 millones previstos en equipamiento y tecnología de última generación en algunas de sus especialidades como Diagnóstico por Imagen, Medicina Nuclear y Genética Médica. Un centro que aspira a estar en marcha el próximo año.

Además de los nuevos proyectos, el interés de los grupos de Sanidad privada por Valencia también está provocando movimientos corporativos. El grupo valenciano Ribera, que tiene como socio de referencia al francés Vivalto, cerró a finales del año la compra de la mayoría del hospital Imske, otro centro especializado que es una referencia en Traumatología, Rehabilitación y medicina deportiva. La intención es ampliar su catálogo de servicios con nuevas unidades, como una de fibromialgia, según apuntan desde Ribera.

WhatsAppTwitterLinkedinBeloud