Madrid
La deuda pública de España se moderó al 109,9% del PIB en el tercer trimestre. Esto la sitúa la ratio 1,3 puntos por debajo del trimestre anterior y 4,1 puntos por debajo del descubierto de hace un año. Aún así, país presenta un descubierto que marcó un nuevo récord de 1.577.266 millones de euros, un 0,5% más que en el trimestre anterior. En tasa interanual, el incremento fue de un 4,8%, añadiendo 72.553 millones más al pasivo del país. Esto es consecuencia de la caída de ingresos y un aumento de los gastos debido a la pandemia, la guerra de Ucrania y la escalada de precios.
Según los datos publicados este viernes por el Banco de España, el crecimiento económico del país es lo que provoca esta caída de la ratio sobre el PIB, a pesar que el descubierto de las administraciones haya marcado una cifra récord.
La ratio de deuda/PIB se moderó más de un punto con respecto al dato del segundo trimestre, cuando alcanzó el 111,2%, y más de cuatro puntos por debajo del mismo trimestre de 2022, cuando es situó en el 114%.
Por desglose, las administraciones del Estado redujo su deuda un 99,9% del PIB, es decir, casi un punto menos que lo registrado entre abril y junio. En términos interanuales, la caída fue de 3,1 puntos. Aún así, el importe sigue marcando un récord: 1.434.695 millones de euros.
Las comunidades autónomas bajaron su pasivo al 22,3% del PIB, lo que supone una caída del 0,9 puntos con respecto al trimestre anterior y 1,6 puntos menos que si se toma como referencia el mismo período del año 2022. Así, el importe del endeudamiento autonómico se rebajó en 7.422 millones de euros, lo que deja un pasivo de 319.924 millones en el conjunto de las regiones.
El plan presupuestario que el Gobierno de Pedro Sánchez envió a Bruselas en octubre prevé que que la economía española mantendrá un elevado dinamismo a pesar del entorno internacional, con un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 2,4% en 2023 que mejora tres décimas respecto al Plan de Estabilidad publicado en primavera. El PIB avanzará un 2% en 2024, cuatro décimas menos de lo previsto en abril, en el ejercicio en el que España cumplirá con los objetivos de déficit que exigirá Europa, según proyecta el Ministerio de Economía.
Al mismo tiempo, aseguran que serán capaces de cumplir con el objetivo de déficit en 2024. Esperan que al cierre de este ejercicio baje al 3,9% y que se coloque en el 3% en el próximo curso, momento en el que entrarán en vigor las nuevas reglas fiscales. El ajuste se va a realizar a través de la vía del gasto, es decir, mejoran la previsión de ingresos públicos una décima (42% del PIB) y recortarán el gasto en ocho décimas (45% del PIB).
Según sus propias estimaciones, el Gobierno va a recaudar 3.795 millones de euros en 2024 si finalmente deciden aplicar la rebaja fiscal en la factura de la luz y la reducción del IVA a algunos alimentos. Solo la bonificación sobre la electricidad ya explicaría algo más de 1.000 millones extra para las arcas públicas, mientras el IVA de los alimentos reportaría otros 1.350 millones en ingresos tributarios en 2024.
Rebajas fiscales autonómicas
En el propio plan presupuestario Moncloa aseguró que las rebajas fiscales aprobadas por varias autonomías provocan un "deterioro" sobre el déficit público. Los departamentos de Nadia Calviño y María Jesús Montero recordaron al Ejecutivo comunitario que el catálogo de bonificaciones y reducciones de los gravámenes gestionados por las regiones restarán 2.050 millones de auros a la partida de ingresos de 2024. "En cuanto a las medidas discrecionales de ingresos, en 2023 tendrán un impacto diferencial estimado de -513,8 millones de euros. Para 2024 el efecto sería de 2.040,3 millones de euros", explica Economía en el texto.
Cataluña, Valencia, Andalucía y Madrid concentran la deuda
Dos tercios de toda la deuda en manos de los gobiernos autonómicos la acumulan Cataluña (84.549 millones de euros), Comunidad Valenciana (55.235 millones), Andalucía (37.485 millones) y Madrid (36.360 millones), aunque esto obedece a criterios de población.
Tras estas cuatro, figuran Castilla-La Mancha (15.688 millones), Castilla y León (14.042 millones), Galicia (12.083 millones), Murcia (11.487 millones) y País Vasco (10.851 millones). En el lado más bajo de la tabla están Aragón (9.133 millones), Islas Baleares (8.874 millones), Canarias (6.672 millones), Extremadura (5.226 millones), Asturias (4.202 millones), Cantabria (3.246 millones), Navarra (3.167 millones) y La Rioja (1.622 millones).
En cambio, si se mide la deuda con respecto al PIB, la Comunidad Valenciana tiene un endeudamiento que supone el 41,2% del tamaño de su economía, por lo que se sitúa a la cabeza de las regiones más endeudadas con respecto a la riqueza que genera. Tras ella está Castilla-La Mancha (31,2%), Cataluña (31%) y la Región de Murcia (30%).
En el conjunto de las comunidades autónomas, la deuda subió en términos absolutos en todas las regiones respecto al tercer trimestre del año pasado, salvo País Vasco, Murcia, La Rioja, Cataluña, Cantabria y Baleares.
