Madrid 
China está inmersa en grandes problemas económicos y esto podría contagiarse a las economías europeas avanzadas con grandes vínculos con el gigante asiático. Alemania es una de las economías más expuestas a esta crisis económica. Según un informe del Bundesbank, las estrechas relaciones económicas entre Pekín y Berlín "plantean riesgos considerables para el sistema financiero alemán". Estos riesgos a los que se refiere son derivados de las relaciones de los prestamistas con empresas nacionales que tienen inversiones en China o venden gran parte de su producción en el gigante asiático.
Al mismo tiempo, fuentes del propio Bundesbank confirmaron a elEconomista.es que los bancos están muy vigilantes porque prestaron enormes cantidades de dinero a empresas en sectores clave de la economía alemana que dependen de proveedores chinos para sus insumos. Con tal motivo, el hecho de que las relaciones germano-chinas se rompan de manera generalizada "aumentaría la probabilidad de incumplimiento de préstamos" lo que provocaría graves problemas en el sistema financiero.
Es cierto que también destacan que una crisis económica en el país asiático "sería mucho más manejable" en el corto plazo.
Desde el banco central también hablan de compañías de seguros o fondos de inversión directas e indirectas en China. En concreto, en su informe hablan de 36.000 millones de euros de activos financieros directos a finales de 2022. Esto correspondió al 11,4% de los activos totales del sistema bancario alemán, frente a un 0,1% de todos los grupos de clientes.
Así, los mayores clientes chinos fueron entidades de crédito, con 18.000 millones de euros, las empresas y los particulares acumularon 11.000 millones y los organismos públicos 7.000 millones de euros en 2022.
En su informe, los expertos del Bundesbank aseguran que para el sistema bancario alemán "surgen importantes riesgos económicos debido a sus vínculos con China". En un escenario de crisis revelan que es probable que se vean afectados los derechos financieros contra los prestatarios alemanes que están particularmente expuestos en China. Entre ellos incluyen empresas con elevadas inversiones directas en el país asiático, pero también los que tienen una fuerte concentración de negocio de exportación o dependencia de importantes servicios avanzados.
Así, a finales de 2022 los activos de bancos alemanes sobre las empresas expuestas de esta índole ascendían a casi 220.000 millones de euros. "Esto representa seis veces los derechos directos frente a prestatarios con sede en China y casi el 42% del capital ordinario agregado de primer nivel", dicen en su informe anual.
En suelo alemán las entidades también están expuestas a industrias y sectores los cuales China es un importante socio de exportaciones. Entre ellos enumeran la ingeniería mecánica, la producción y procesamiento de metales, así como los servicios de transporte marítimo y aéreo. "La importancia de la demanda china para la creación de valor añadido es mayor en estos sectores". Así, los activos del sistema bancario en empresas relacionadas con estos sectores ascendieron a los 140.000 millones de euros a finales de 2022, según las cifras que manejan en el Bundesbank. "Para el banco promedio representaban alrededor del 40% del capital básico", aseguran.
Pero, además del sistema bancario, el crecimiento de Alemania también se puede ver afectado en el caso de que China entrase en crisis. "Una crisis económica en China similar a las que han ocurrido en el pasado en otros países después de una corrección del crecimiento excesivo del crédito sería posiblemente manejable para la economía alemana", aseguran los expertos.
Los cálculos del Bundesbank sugieren que una crisis económica en China podríahacer que el PIB real de Alemania cayese un 0,7%en el primero año de la crisis, seguido de una contracción de un 1% en el segundo año.
"Sin embargo, una desvinculación abrupta, como resultado de una crisis geopolítica, asestaría un golpe mucho más duro a la industria", agregaron. Es cierto que solo el 7% de las exportaciones alemanas se fueron a china en 2022, pero sectores como la automoción dependen mucho de la demanda china.
