Banca y finanzas

El Gobierno prorroga un año el impuesto a la banca y a energéticas y abre la puerta a su permanencia

  • Modifica el gravamen para que las energético puedan deducirse las inversiones estratégicas
  • La banca alerta de que perjudicará al crédito y la "confianza en el país"

La banca y el sector energético soportarán, al menos, un año más el impuesto extraordinario establecido por el Ejecutivo sobre los ingresos generados durante 2022-2023. Así lo anunció este miércoles el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros donde se ha aprobado una extensión parcial de las medidas de apoyo frente al aumento de los precios y las consecuencias de la guerra en Ucrania.

"Se van a prorrogar por un año los gravámenes a los beneficios extraordinarios tanto del sector financiero como del sector energético, es decir, las grandes empresas energéticas y también la gran banca", anunció.


El impuesto temporal a los bancos grava al 4,8% los intereses y comisiones generados en España por su actividad bancaria en aquellas entidades que facturasen más de 800 millones en 2019. El tributo energético grava a su vez el 1,2% de la cifra de negocio de las compañías del sector que facturasen más de 1.000 millones en 2019, excluyendo para el cómputo los ingresos derivados de las actividades reguladas.

El gravamen afectaba, en un origen, a los ingresos devengados en el bienio 2022 y 2023, a pagar en la Hacienda Pública en los ejercicios 2023 y 2024. El Gobierno lo justificó en su día en los resultados "extraordinarios" que, a su juicio, obtiene el sector energético con el aumento de los precios de la energía y la banca por la subida de tipos de interés.

Sobre el tributo energético, Sánchez avanzó que se introducirán "modificaciones" en la Ley General de Presupuestos para que las compañías se puedan deducir "desde el 1 de enero las inversiones estratégicas vinculadas con proyectos industriales y vinculadas también con la descarbonización del sistema productivo en nuestro país". Pero también avanzó que se producirá una revisión del gravamen el próximo año "de una figura tributaria que pasará ya a contar con un carácter permanente".

"Como saben ustedes, el impuesto fue diseñado con una pervivencia de dos años, vencería el 31 de diciembre de este año, del año 2023 y por tanto, lo que hemos hecho ha sido garantizar su pervivencia a partir del año 2024, una vez revisada en el sentido que antes les he expuesto sobre las inversiones vinculadas con proyectos industriales para la descarbonización de nuestra economía", expuso.

En el comunicado distribuído por el Ministerio de Hacienda con el paquete de medidas de carácter fiscal aprobadas hoy en el Real Decreto Ley indica que dicha regulación "contempla la futura revisión de ambos gravámenes para su plena integración en el sistema tributario", dejando la puerta abierta.

La banca rechaza la prórroga del gravamen

La respuesta del sector ha sido inmediata y contraria por el fondo y las formas. Las patronales AEB y CECA rechazaron la extensión de un gravamen sobre el que avisan que "tiene efectos negativos sobre la generación de nuevo crédito, la creación de empleo, el crecimiento económico y la estabilidad financiera, en un contexto de incertidumbre económica internacional". En un comunicado conjunto lamentaron que "afecta negativamente a la competitividad del sector bancario y la confianza en el país", dado que los inversores "demandan estabilidad jurídica, previsibilidad de las normas y transparencia".

La banca, que ya ha recurrido el gravamen en los tribunales, recordó que el propio Banco Central Europeo (BCE) ha advertido sobre los potenciales efectos negativos de este tipo de tributos y afeó la decisión del Gobierno. "La decisión del Ejecutivo no atiende la obligación de revisar a los dos años el gravamen temporal contenida en la ley que lo creó en función, entre otros factores, de la situación del sector en ese momento y del efecto acumulativo de dicho gravamen junto con el Impuesto sobre Sociedades, y se produce sin que los tribunales se hayan pronunciado todavía sobre los recursos presentados por las asociaciones bancarias", criticaron las patronales.

Amortizar hipotecas

En el pack de medidas aprobadas por el Consejo de Ministros relacionadas con la banca figura también la suspensión durante todo el año de los desahucios y alzamientos "para los hogares vulnerables que no cuenten con una alternativa habitacional".


Además habilitará durante seis meses la amortización anticipada gratuita en hipotecas a tipo variable, con la supresión de las comisiones asociadas a estos procesos, y prohibirá además por ley las comisiones bancarias por retirada de efectivo en ventanilla para las personas con algún tipo de discapacidad y también para las personas mayores. "Esta es una medida inequívoca de justicia social", manifestó Sánchez.

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