Barcelona
Una vez vista la luz tras la pandemia, Areas se prepara para reestructurar la deuda. La compañía de restauración arrastraba al cierre del ejercicio 2022 un pasivo que rondaba los 1.500 millones de euros mientras las pérdidas eran todavía de 31,4 millones. La compañía ha recuperado ya prácticamente los niveles de rentabilidad prepandemia y está inmersa en una agresiva expansión en Estados Unidos. Con los nuevos vientos de cola, pretende lanzar nuevos instrumentos de deuda para hacer frente a los más de 1.200 millones de euros en vencimientos que le esperan en 2026.
Según la información a la que ha tenido acceso elEconomista.es, la organización controlada por PAI Partners negocia un nuevo instrumento de deuda por 1.100 millones de euros con vencimiento hasta diciembre de 2029. También está en conversaciones con la banca para firmar una línea de revolving por 175 millones de euros para dotarse de liquidez necesaria en sus operaciones del día a día.
La firma liderada por Óscar Vela pretende destinar la mayor parte del montante percibido en repagar los diferentes préstamos por más de 1.200 millones que acumula. El principal, el crédito sindicado de 1.050 millones de euros firmado en 2019 para apalancar la entrada de PAI Partners que debe devolver con un solo pago en junio de 2026. Además, arrastra una segunda línea de 150 millones que vence en la misma fecha y un tercer crédito de 108 millones de euros avalado por el Estado francés con motivo de la pandemia.
A pesar del contexto actual, con tipos superiores a los de hace un lustro, Areas aspira a mejorar las condiciones del actual programa de deuda, fijadas en Euribor +4,75%.
Contactada por este medio, la compañía no hizo comentarios sobre la operación, que ha sido calificada con la nota de B3 (bono basura) por parte de la agencia de calificación Moody's. Los analistas de la firma valoran que la empresa catalana cuenta con liquidez suficiente con los 240 millones de euros de efectivo y equivalente que lucía en septiembre de 2023. En cambio, sí advierten que el cash flow en el próximo año y medio seguirá siendo negativo por los costes de capital derivados de la expansión, que se incrementarán en 2024 para relajarse en 2025, y los intereses de la deuda.
La firma sí aspira volver a alcanzar unos márgenes del 10% de Ebitda en el próximo año y medio, la ratio que tenía antes del impacto del coronavirus, frente al 8,8% que registró en el ejercicio cerrado el pasado septiembre. Por ello, la previsión es que la relación deuda/Ebitda caiga a las 4,5 veces frente a las 6,1 veces de la campaña 2023.
En el último año fiscal, Areas tuvo una facturación de 2.095 millones de euros frente a los 1.698 millones del ejercicio 2022/2023 y con los márgenes hechos públicos el Ebitda debería rondar los 180 millones de euros frente al resultado operativo de 72,7 millones previo. En la campaña 2020/2021, las ventas fueron de 828,4 millones de euros por el golpe del coronavirus.
La expansión de Areas
La organización ha pisado el acelerador a nivel operativo a base de imponerse en concursos internacionales, que le reportarán una facturación añadida de 330 millones de euros al año solo con los triunfos de los últimos meses.
En total, contratos por valor de 2.700 millones entre los que sobresalen el de la restauración del aeropuerto Internacional de Atlanta (200 millones por 10 años), tres áreas de servicio en la autopista West Virginia (248 millones en 15 años), la restauración en el aeropuerto William P. Hobby de Houston (450 millones en 10 años) o cinco nuevos establecimientos en el aeropuerto de San Diego (550 millones en 15 años).
En España, Áresas se asignó la restauración del aeropuerto de Madrid-Barajas, valorado en 1.000 millones por un periodo de ocho años, así como obtuvo la exclusividad de la oferta gastronómica en el recinto ferial Ifema Madrid.
