ACS registró un beneficio neto de 780 millones de euros en 2023, lo que supone un incremento del 16,7% con respecto a los 668 millones que se anotó en 2022 gracias al positivo comportamiento de su constructora alemana Hochtief, en la que continúa creciendo en el capital, y a la mayor contribución de Abertis.
El resultado de las actividades del grupo creció un 16,6%, hasta 667 millones. A ello añade 113 millones por resultados extraordinarios y la aportación de las actividades inmobiliarias y de energía. Esta cifra mejora en un 17,6% los 96 millones de 2022.
El beneficio neto del área de construcción creció el 23,8%, hasta los 434 millones. Mientras, la división de concesiones generó 206 millones, un 5,7% más, distribuidos entre Abertis (197 millones) e Iridium (26 millones). Por último el área de servicios que está aglutinada en Clece obtuvo unas ganancias de 28 millones, un 1,3% más que en el ejercicio precedente.
La compañía que dirigen Florentino Pérez, como presidente, y Juan Santamaría, como consejero delegado, puso a finales del año pasado a la venta Clece, por la que ya ha recibido ofertas indicativas. De acuerdo con las fuentes consultadas, tiene sobre la mesa tres propuestas por la compañía. La prioridad de ACS es vender en un único proceso la filial. No obstante, también ha obtenido ofertas parciales por algunos de los negocios que desarrolla la firma, como son las actividades de facility management y de servicios sociales. Entre estas últimas figura la de Serveo, la compañía controlada por Portobello y participada por Ferrovial.
El resultado bruto de explotación (ebitda) de ACS ascendió a 1.909 millones de euros, lo que implica un alza del 9,2% frente a 2022 (+13,5% ajustado por tipo de cambio). Mientras, las ventas del grupo alcanzaron los 35.738 millones, con un crecimiento del 6,3% (10,3% ajustado por tipo de cambio). América del Norte continúa ganando peso en el reparto de la cifra de negocio y ya acapara el 62% del total. Le sigue Australia, con el 21%, España, con el 9%, el resto de Europa, con el 6%, y el resto del mundo, con el 2%.
En cuanto a la cartera, la multinacional española la impulsó un 6,6% (9,4% ajustado a tipo de cambio), hasta los 73.538 millones.Un crecimiento derivado de la evolución de la contratación, que se situó en 45.104 millones en el año. De esta cantidad, el 44% está relacionado con proyectos de infraestructuras de nueva generación, consolidando así la apuesta del grupo por este tipo de activos. Norteamérica acapara el 52% de la cartera, Australia el 23%, España el 9%, el resto de Europa el 11% y el resto del mundo el 5%. La firma también destaca el avance en su objetivo de reducir los riesgos de sus obras. Así, el 85% de la cartera de infraestructuras tiene un perfil de riesgo medio-bajo comparado con el 60% en diciembre de 2017.
ACS invirtió 1.057 millones durante 2023 en el desarrollo de la actividad operativa y en proyectos, entre los que destaca la adquisición del 7,5% de Hochtief y del 78% de la autopista SH-288 de Texas por 1.446 millones -en diciembre vendió el 57% a Abertis por 1.415 millones-.
El grupo de infraestructuras incrementó la caja neta en 176 millones, hasta los 400 millones. Asimismo, aumentó su deuda neta un 18,6%, al pasar de 21.809 millones en 2022 a 25.875 millones en 2023.
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