Salud

Solo el 42% de los pacientes consideran la obesidad como una enfermedad

  • Suelen asociarlo como una consecuencia de otra patología, problemas emocionales o estéticos, según un informe
  • Más de una de cada diez personas con sobrepeso esperan más de cinco años para obtener un diagnóstico
Madridicon-related

La prevalencia de la obesidad se ha triplicado en los últimas tres décadas. De hecho, a día de hoy el 60% de los españoles la padecen. Sin embargo, solo cuatro de cada diez pacientes –en concreto, el 42% - la consideran una enfermedad, según el informe "La situación sanitaria y social de las personas con obesidad en España", que ha elaborado la Alianza por la Obesidad (compuesta por 13 organizaciones de pacientes y sociedades científicas).

Casi tres de cada diez pacientes entienden la obesidad como una consecuencia de los problemas emocionales y el 17% la asemejan a falta de voluntad. Además, tal y como plasma el informe, el 12% ve el sobre peso como una consecuencia de otras enfermedades y el 3% como un problema estético. "La percepción que tienen es muy baja. Se entiende más como un factor de riesgo que como una patología", dice el presidente de Cardio Alianza, Tomas Fajardo.

La obesidad puede desencadenar otras enfermedades como la diabetes – que representa el 40% de su coste asociado -, patologías cardiovasculares – se asocia al 30% de los casos -, hipertensión y ciertos tipos de cáncer, según apunta la presidenta de la Asociación Bariátrica Hispalis Nacional, Victoria Buiza. Además, posee el 32% del gasto vinculado a las enfermedades articulares. También, "existe una relación entre la sobrepeso y la disminución de la esperanza de vida", afirma el presidente de la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, Agustín Santos.

Esta enfermedad, considerada la epidemia del siglo XXI, presenta una detección tardía, según los expertos. Y es que, hay pacientes que tienen que esperar hasta cinco años para un diagnóstico. En concreto, el 13%, según el informe. Además, un 7% aguarda entre tres y cinco años, uno de cada diez personas entre uno y tres años, y otro 7% entre seis y doce meses. El resto de personas esperan seis meses para ser diagnosticados.

Hay varios factores que explican este diagnóstico tardío. Por un lado, la falta de conocimiento y el estigma por parte de los profesionales sanitarios, dejando "relegada" esta enfermedad. "Creemos que se tarda mucho en detectar No es normal que una persona que lleva diez años yendo al médico le digan que tiene colesterol y en realidad tenga obesidad", dice el vocal de la Federación Española de Diabetes (Fede), Jose M. García.

La presidenta de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), Juana Carretero, apunta que el problema se encuentra en cómo se diagnostica esta enfermedad. "La detectamos con un número (Índice de Masa Corporal) y no todos los cuerpos son iguales", recalca.

Además, el documento refleja que el 54% de los pacientes con obesidad ven "muy deficiente" la coordinación entre los profesionales de la salud en el manejo de esta enfermedad, mientras que solo el 9% la describe como "buena" y el 3% como"muy buena".

Este estigma también lo padecen los propios pacientes. Y es que, solo acuden a consulta cuando aparecen las comorbilidades asociadas al sobrepeso. Preguntan cuando ya han desarrollado otros factores de riesgo como, por ejemplo, la diabetes o enfermedades cardiovasculares", dice Carretero. "A veces cuando les diagnosticamos obesidad se sienten ofendidos por todos los aspectos que giran entorno a esta enfermedad en la sociedad", agrega la miembro del Grupo de Trabajo del Área de Endocrino Metabólica y Nutrición de la SEMG, Paola Martínez.

Otro factor es la lista de espera, que afecta sobre todo a la cirugía bariátrica. Actualmente, solo acceden a esta práctica el 2% de los pacientes que pueden beneficiarse. "La espera para esta operación es de muchos meses e incluso en algunos casos más de un año. Cuando una persona con obesidad llega al cirujano bariátrico suele llevar mucho tiempo viviendo con esta enfermedad", explica el cirujano bariátrico del Hospital Clínico San Carlos, Esteban Martín.

El impacto emocional de la obesidad

La obesidad tiene un impacto emocional. Según consta en el informe, siete de cada diez pacientes están preocupados por los efectos secundarios de esta enfermedad en la salud y el 68% presenta una baja autoestima. Además, tres de cada cinco tienen vergüenza por su apariencia física y peso, y el 55% afirman que sufren discriminación en el ámbito social.

También la mitad de los pacientes apuntan que tienen dificultades para encontrar productos y espacios adecuados para su condición corporal y el 31% presentan complicaciones para mantener relaciones sociales y sentimentales, y dicen que sufren discriminación en el trabajo.

Ante este escenario, los expertos proponen potenciar el reconocimiento real de la obesidad como una enfermedad crónica, desarrollar campañas de concienciación y sensibilización de esta patología. Además, aconsejan implementar programas para su detección precoz y establecer protocolos de tratamiento y seguimiento personalizados integrales.

También aconsejan incorporar la cirugía bariátrica en las listas de priorización de los sistemas sanitarios y ampliar la oferta de esta operación y llevar a cabo un seguimiento. Por otro lado, proponen instaurar equipos multidisciplinares específicos para el abordaje de la obesidad. De igual importancia, piden ampliar el acceso a la atención psicológica.

WhatsAppTwitterTwitterLinkedinBeloudBeloud